CARMEN ARISTEGUI,

GOLPE A LA LIBERTAD 

DE EXPRESIÓN

Carmen Aristegui.

Carmen Aristegui, una de las voces más respetadas y de mayor prestigio en el periodismo mexicano fue despedida de su programa de radio matutino, -el de mayor audiencia en el país-, por pedir la reinstalación de dos periodistas de su equipo de investigación que fueron despedidos injustamente por la empresa MVS-Radio. En una campaña de desprestigio se argumentó con ligereza que la comunicadora utilizó sin autorización el nombre de MVS al integrarse a la plataforma Mexicoleaks, cuyo fin es recibir información ciudadana de denuncia para los  medios de comunicación.

Antes, Carmen Aristegui había dado a conocer la corrupción de altos funcionarios de la presidencia que recibieron favores por contratos de obras. Nadie inventa: Allí está la Casa Blanca de la esposa del presidente. Y la casa de Malinalco del Secretario de Hacienda Luis Videgaray, adquirida a menor precio de su valor real, según una investigación de The Wall Street Journal.

Estas dos casas fueron vendidas por uno de los grandes contratistas del gobierno federal y también beneficiario de obras en el tiempo de Peña cuando fue Gobernador del Estado de México. 

Conflicto de intereses, ni más, ni menos.

EL GOLPE

No es la primera vez que el Estado maniobra para quitar de su camino a verdaderos periodistas que denuncian la corrupción. 

Recordemos el caso del tristemente célebre presidente Luis Echeverría que en 1976 maniobró y sacó de la dirección de Excélsior a Julio Scherer García. 

O el caso de José Gutiérrez Vivó,  -hoy viviendo en el exilio-, que cerró su noticiario Monitor en 2008 acosado por el presidente Felipe Calderón Hinojosa y también por su antecesor Vicente Fox Quezada.

El actual gobierno se ha desligado del caso Aristegui-MVS, argumentando que es un asunto de particulares, nada más alejado de la verdad. Se trata simplemente de un golpe a la libertad de expresión eliminando a la periodista que día a día en la radio nos informó con veracidad. 

En tanto, la jauría de conocidos comunicadores al servicio del mejor postor ejercen la calumnia y el desprestigio contra Carmen Aristegui.

El juicio legal ha iniciado entre Aristegui y MVS. Deseamos una sentencia justa que condene la arbitrariedad  patronal para acallar a una de las periodistas más limpias de México.

Hoy y siempre estaremos con Carmen Aristegui.