martes, 9 de junio de 2020

--NEGRO PANORAMA POR FALLECIMIENTOS DE COVID-19--





MÉXICO LLORA Y LLORARÁ 
A SUS MUERTOS, SIN REMEDIO





Al principio de agosto próximo, México llegará a los 52 mil muertos por covid-19, según el Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington. Y con datos de la Universidad Johns Hopkins, México se coloca en el séptimo lugar mundial con mayor número de fallecimientos. Vamos mal, no hay duda. Los científicos afirman que al coronavirus hay que salir a cazarlo y no esperar pasivamente que llegue a nosotros. Aquí, la aplicación de pruebas para detectar el virus es casi nula. ¿Por qué nadie habla de Vietnam, aquel hermoso país asiático que derrotó en una guerra al imperialismo norteamericano y que con 98,54 millones de habitantes, después de controlar la pandemia,  regresó a la normalidad con un resultado de 268 personas infectadas y cero muertos? Vietnam comparte más de 1,200 kilómetros de frontera con China. ¿Por qué en México mueren miles de personas y en Vietnam, no? La respuesta: Vietnam se enfrentó al coronavirus como si estuviera en guerra y en cuanto supo de su existencia, a pesar de contar con una débil infraestructura de salud pública. Todo el pueblo cooperó, aún con medidas que fueron drásticas, sobre todo de aislamiento. No como ocurrió en México que tardíamente se empezó a enfrentar la pandemia y a falta de un líder, de una voz que convenciera, se permitió y se continúa permitiendo a millones de personas movilizarse sin ningún control, propagando el contagio que hoy cuesta miles de vidas que al final tendrán nombre y apellido. Se regresó a la normalidad de empresas esenciales en plena pandemia con el peligro latente del rebrote que costara más muertes. Al parecer, no es prioridad del gobierno la lucha contra el coronavirus, sino que hay otras prioridades como son los megaproyectos del Tren Maya, la Refinería de Dos Bocas y el aeropuerto de Santa Lucía. Cuauhtémoc Cárdenas planteó que habría que posponer estos proyectos, y todos los recursos que allí se emplean canalizarlos al combate del coronavirus. Pero hay oídos sordos, la obras continúan y continuarán. México va rumbo al caos, llora y llorará a sus miles de muertos, sin remedio. No sabemos, al paso de los años, cómo la historia juzgará a un presidente que habla y desorienta. Un presidente pendenciero con los medios de comunicación y con los sectores productivos. Un presidente que no ha intentado meter en prisión a los delincuentes del sexenio pasado que se enriquecieron con los negocios y el dinero de las arcas públicas. Vengativo con sus ex aliados. ¿Por que Rosario Robles está presa y los otros no? El presidente que fracasa en su lucha contra la delincuencia. El presidente que no le importa el fomento de la cultura. El presidente que dio pensión a millones de personas para fortalecer el voto hacia su partido, Morena. Andrés Manuel López Obrador, el político que desea ser el mejor presidente y hasta hoy, no lo es. 




Los muertos del coronavirus
en México, tendrán nombre
y apellido.




VIETNAM

SUPERÓ EL COVID-19,
CON 0 MUERTOS










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